Explicación de la conexión a tierra

¿Qué es la conexión a tierra?

La conexión a tierra, también conocida como grounding, es la práctica de conectar con la energía natural de la Tierra con fines curativos. Puedes lograrlo caminando o sentándote descalzo al aire libre, o utilizando productos especiales para interiores diseñados para la conexión a tierra. Este sencillo método ofrece importantes beneficios para la salud, como la reducción de la inflamación a largo plazo y la mejora del bienestar general de personas de cualquier edad, así como de las mascotas.

El flujo de electrones

La Tierra emite energía de forma natural en forma de electrones desde abajo, los cuales desempeñan un papel vital en el mantenimiento de nuestra salud y en el mantenimiento de la tierra y los océanos con una sutil carga negativa. Esta carga planetaria inherente ayuda a regular los procesos bioeléctricos de la vida en todo el mundo, garantizando la armonía y el equilibrio. Sin embargo, hoy en día muchos seres humanos están desconectados de este ritmo natural debido a la tecnología moderna, que altera nuestra conexión eléctrica constante con la Tierra.

La desconexión

La separación de la sociedad moderna de la energía de la Tierra se atribuye a factores como las camas elevadas, los edificios altos y las suelas sintéticas de los zapatos. Se cree que esta desconexión es un factor importante que contribuye a la prevalencia generalizada de enfermedades crónicas, dolor y disfunción a nivel mundial.

El impacto en nuestra salud

La conexión a tierra, también conocida como el contacto directo con la Tierra, permite que nuestro cuerpo absorba electrones que impactan positivamente nuestra salud. Las investigaciones indican que estos electrones de la Tierra son cruciales para nuestro bienestar, al igual que los nutrientes esenciales y la luz solar. De forma similar a cómo los sistemas eléctricos necesitan la conexión a tierra para su estabilidad, nuestros cuerpos bioeléctricos se benefician enormemente de estar conectados a la Tierra.

La conexión a tierra es vital para nuestro cuerpo, ya que funciona eléctricamente. Los electrones de la Tierra emiten señales electromagnéticas que regulan los ritmos y funciones corporales diarios. Estudios han demostrado que la conexión a tierra mejora el flujo sanguíneo facial, lo que resulta en una mejor nutrición de los tejidos faciales y una apariencia más juvenil.

La conexión a tierra es una práctica natural e inocua que implica reconectarse con la Tierra. Es una práctica que vale la pena explorar para restablecer la conexión con la Tierra y mejorar el bienestar general.